FICHA TÉCNICA DE LA RUTA | |
El Port : Ermita de Las Nieves – Cova del Rastre – Rito – Gubies Regatxol | |
Fecha | 5 de Septiembre de 2009 |
Senderistas | Angel, Jose |
Valoración | |
Destacable | La profunda Cueva del Rastre y las impresionantes Gubias del Regatxol con sus pozas de agua cristalina y sus imposibles formaciones rocosas. |
Recorrido | Ermita – Pla d’Avaria – Mola de Catí – Cova del Rastre – Canal de Rito – Rio Ulldemó – Gúbies del Regatxol – Barranco del Tall Nou – Salt del Cabrit – Pla d’Avaria - Ermita |
Problemas | Nada destacable |
Distancia | 22,32km |
Desniveles | Alt.mínima : 684 - máxima : 1276 - acumulada : 1182m |
Tiempo total | 9h 9min, 5h 40min en movimiento, 3.94km/h en mov. |
Dificultad | Moderada - Alta |
Track | Descarga en Wikiloc |
INTRODUCCION
En esta ocasión os traemos otra más que interesante ruta por el Parque Natural de Els Ports. Sigue fielmente el recorrido que encontré en el blog de los amiguetes de Casi Aventurilla, bitácora que sigo habitualmente y que os recomiendo.
Estamos ante un recorrido exigente en cuanto a kilometraje y desnivel acumulado pero que compensa con creces el esfuerzo dadas las maravillas que encontraremos en el discurrir del camino.
Andaremos entre espesos bosques, ascenderemos a la Mola de Catí para disfrutar de estupendas panorámicas sobre el Monte Caro, visitaremos las profundidades de la Cova del Rastre, realizaremos un vertiginoso descenso por la Canal de Rito y nos empequeñeceremos ante las inmensas moles de roca que esconden las Gubies del Regatxol.
Para progresar por la Gubias es imprescindible el bañador y no asustarse ante el agua muy fría, ya que hay diversas pozas de agua que tendremos que atravesar para visitarlas al completo.
PUNTO DE INICIO
Se inicia el recorrido desde La Ermita de Las Nieves, situada a los pies del Monte Caro. Para llegar hasta allí nos acercaremos al refugio del Caro, situado en el Parque Natural de Els Ports.
Dejando el refugio a la derecha continuaremos por pista asfaltada para encontrar una indicación hacia la ermita.
Al poco de perder la pista el asfalto, encontraremos la ermita a la izquierda del camino. Aquí podemos dejar el coche.
DESCRIPCIÓN DEL RECORRIDO
De nuevo en la zona de El port y de nuevo disfrutando de lo lindo.
Dejando el coche en una placeta que se encuentra enfrente de la Ermita de Las Nieves volveremos a la pista para continuar por ella desechando los desvíos que aparecen a la izquierda hasta llegar en apróximadamente 1km a una zona donde el bosque se abre y aparece un claro conocido como el Pla d'Avaria.
Estamos ante un cruce de caminos y tomaremos el que continúa por la derecha en dirección a la mole rocosa que tenemos en esa dirección, la Mola de Catí.
Continuamos un corto trecho por pista para encontrar enseguida una fita que marca el inicio de una bonita senda. Andamos en una zona con abundantes pinos de buen porte y rodeados de boj.
Rodeados de boj
Pronto el camino cruza el Barranco de la Saliassa y empieza a ascender considerablemente hacia lo alto de la Mola de Catí. A medida que vamos ascendiendo obtenemos buenas panorámicas sobre el Monte Caro, el Coll de Pallers y las sierras colidantes.
La Mola de Catí
También se puede apreciar como va cambiando la vegetación, el boj desaparece y los pinos son más escasos.
Tras un fuerte ascenso correctamente marcado con suficientes fitas llegamos a un claro donde vemos un pilón de MP. Tenemos tres caminos, tomaremos primero el de la izquierda para visitar la Cova del Rastre y volver luego a este punto.
Pilón de MP
De este modo nos desviamos a nuestra izquierda para seguir una senda, poco definida pero con algunas fitas que nos guiarán por el camino hacia la cueva. Conviene estar atentos ya que es fácil pasarse de la entrada que se encuentra a unos 800 metros del pilón de MP. Justo cuando el camino empieza a descender bruscamente, encontraremos a la derecha del mismo la entrada de la cueva con una placa que la identifica.
Hacia la Cueva del Rastre
La cueva presenta dos entradas, la de la derecha tiene una única cámara de poca amplitud y sin gran interés.
Conviene adentrarse en la entrada de la izquierda que, aunque menos accesible, nos ofrecerá una experiencia fabulosa.
La Cova del Rastre
Tras superar la entrada podemos ponernos de pie y avanzar por el interior de la cueva. Tras una cámara se sucede otra más amplia y un pequeño pasillo nos acerca a una abertura en la roca que atravesaremos para llegar a la cámara más amplia de la cueva.
Resulta impresionante. Estamos ante una cavidad de gran anchura y altura en la que podemos ver en algunas paredes inscripciones con fechas que nos dejarán helados, no en vano esta cueva era un refugio de los maquis. Se cuenta que tan oculta estaba la entrada que pasaba desapercibida a las autoridades.
En la parte más profunda de la cueva encontramos una escalera de madera en precario estado, así como restos de latas y una antorcha que quizás usaron los guerrilleros en sus añejos quehaceres.
En la Cova del Rastre (‘click’) para ampliar las fotografías
Cabe decir que para visitar la cueva resulta imprescindible linternas potentes, nosotros llevábamos luces frontales e incluso resultaron insuficientes en algunos tramos.
Visitada la cueva desandaremos nuestros pasos hasta encontrar el pilón de MP, punto en el que continuaremos el camino por la izquierda, tomando una pista.
A pesar de andar por pista que nunca nos acaba de convencer, el tramo es muy agradable dada la abundante vegetación y árboles que nos acompañan.
Por la pista
En el transcurso del recorrido por la pista tomaremos el primer cruce que encontramos por la izquierda, siguiendo recto en el próximo cruce.
Otro cruce más a la izquierda y, por fin, a unos 3,5km desde que salimos del pilón de MP veremos a la izquierda de la pista unas fitas que indican el inicio de la Canal de Rito.
La entrada a la Canal de Rito
Se nos presentan 3km de tremenda bajada por la canal que en principio es cómoda pero pronto muestra su agreste forma y su carácter arisco típico de los parajes de El Port. Empinada, pedregosa, estrecha y ¡emocionante!.
Por la Canal de Rito
Estando en la canal debemos detenernos y mirar hacia atrás para ver el camino realizado. Posteriormente y con calma observaremos el camino que nos queda por recorrer y en lo alto, enfrente nuestro, veremos una magnífica formación rocosa conocida como el Morral d'en Garcés. Hasta su base llegaremos más adelante así que conviene hacerse una idea de lo que nos espera. Del mismo modo si nos paramos a observar y escuchar detenidamente nos daremos cuenta de la increíble sensación de aislamiento que nos ofrece esta zona, la serenidad nos invadirá.
Imponentes paredes, al fondo el Morral d’en Garcés
Continuamos descendiendo a la vista de suficientes fitas y marcas rojas y amarillas. En un pequeño collado veremos que hay una fita que nos desvía ligeramente a la izquierda del camino. Merece la pena acercarse y asomarse al precipicio que se nos ofrece. Veremos el barranco de la canal y enfrente, fabulosas paredes de formas escarpadas nos embeleserán. Estupendo lugar para disfrutar de un almuerzo a la sombra que nos obsequian los pinos.
Volvemos al camino y seguimos descendiendo, pronto atravesamos un curioso collado conocido como el Coll Roig. Recibe su nombre del color rojo de la tierra que allí se encuentra.
El Coll Roig y el Morral d’en Garcés
La inclinación del descenso se incrementa aún más desde este punto para llegar en unos 300 metros hasta el río Ulldemó.
El suave fluir del agua del río es hipnotizante, pero no nos entretenemos y empezamos a andar por el río aguas arriba en busca de las Gúbias del Regatxol.
Llegamos al río
El camino no está definido pero el progreso no es difícil.
Andando por la margen derecha del río encontraremos un manantial de agua que surge del suelo, conocido como Els Ullals del Tall Nou. Un poco más adelante y a la vista de una fita de piedras, el cauce se divide a izquierda y derecha.
Ullals del Tall Nou
Nos quedamos con este punto ya que aquí volveremos después de visitar las Gúbias.
De momento continuamos por la izquierda, en unas ocasiones por camino y en otras por el mismo cauce del río, ahora prácticamente seco.
Hacia Las Gúbias
Pronto el paso se ve bloqueado por grandes bloques de piedras, asimismo vemos a izquierda y derecha enormes moles rocosas de formas imposibles que nos rodean y nos empujan a seguir avanzando. Estamos en Las Gúbias del Regatxol.
En Las Gúbias
Superamos los bloques de piedras avanzando asombrados ante tan inhóspito entorno para encontrar pronto la primera de las pozas de agua que nos corta el paso. Sólo hay un camino posible, atravesando la poza a nado.
La primera de las pozas
Pero hay que pensárselo, teníamos 15º de temperatura ambiente y el agua parecía estar bastante más fría .... pero ¡qué narices! ... habíamos venido a ver Las Gúbias y un poco de fresco no nos iba a frenar.
De este modo, y con la risa en el cuerpo nos ponemos el bañador a la carrera y sin pensarlo mucho, ¡al agua!. Brrrr ...realmente estaba fría (me entran escalofríos al recordarlo mientras escribo la crónica ... aunque también mucha satisfacción).
Debemos atravesar la poza a nado para encontrar una sólida cuerda que nos ayudará a salir del agua y superar un resalte rocoso para seguir adentrándonos en las Gúbias.
Estamos en una garganta de altas paredes, nos empequeñecemos ante tanta majestuosidad. Otra poza fría y ancha que atravesamos nadando y otra más pequeña que podemos pasar andando. Continuamos un corto tramo más para llegar al final de la garganta. Ante nosotros y rodeándonos enormes paredes verticales, inaccesibles. A sus pies una poza parece rendirle pleitesía creando una curiosa imagen que resulta fascinante.
Imágenes de la aventura en Las Gúbias
Saciada nuestra ansia aventurera, desandaremos nuestros pasos hasta la fita que habíamos visto donde el cauce del río se bifurcaba. En esta ocasión seguiremos la fita que nos lleva por un camino en fuerte ascenso, siguiendo el Barranco del Tall Nou y en dirección al Morral d'en Garcés.
Subiendo hacia la pista
El camino no tiene pérdida, hay suficientes fitas y marcas violetas. Conviene tomárselo con calma puesto que su inclinación es importante. En poca distancia llegaremos a la Pista del Regatxol que tomaremos hacia la izquierda.
Nos esperan 5,5km de pista sin desvío alguno. Al iniciar la pista y tras un corto tramo de subida, podemos desviarnos a la izquierda y asomarnos a unos resaltes rocosos que sirven de improvisado mirador hacia las Gúbias. Vistas desde arriba no conseguimos distinguir las pozas, haciéndose evidente lo cerrado de la garganta.
Impresionantes vistas
Estamos en la base del Morral d’en Garcés
Continuaremos por la pista que pronto realiza un fuerte descenso para situarse a nivel del Barranco del Regatxol que será nuestro compañero en el resto de pista que nos queda por recorrer.
Desde que conectamos por el barranco el camino asciende suave pero continuamente atravesando bonitos bosques de arces.
Un camino con encanto
Conviene estar atentos a la parte izquierda del camino en un tramo donde la pista asciende considerablemente, veremos un cortado en el barranco con un agujero muy profundo. Se trata del Salt del Cabrit, que debe ser impresionante con agua.
El Salt del Cabrit
Encontramos una cueva a la derecha del camino
Recorrida la distancia indicada, la pista se desvía a la derecha y vemos un camino que continúa recto y que debemos tomar.
Dejamos la pista y continuamos recto por una bonita senda
Está poco definido pero no es difícil progresar por él. Pronto encontraremos fitas que nos guiarán sin dificultad hasta un camino más ancho que tomaremos hacia la derecha.
Un corto tramo más de subida y llegamos al Pla d'Avaria. Ya en terreno conocido, tomamos la pista hacia la izquierda para, en 1km escaso llegar hasta la ermita y el final del recorrido de hoy.
El Caro desde el Pla d’Avaria
Llegamos a la Ermita de Las Nieves, fin del recorrido
La Photo-Finish
Intentando resumir : estamos ante un recorrido impresionante, imprescindible diría yo. Tanto las bellas sendas que atravesaremos, como la visita a la increíble Cova del Rastre con sus 70 metros de profundidad merecen una excursión.
Si a esto le añadimos la visita a las Gúbias y el punto aventurero que tiene adentrarse en ellas tenemos una ruta completa de gran encanto, aunque exigente en cuanto a kilometraje y desnivel.
RECURSOS Y OTROS DATOS
- Gráfica de altitudes
- Track en Wikiloc
TODAS LAS FOTOS
VIDEOS
Xeeee, quina ruta mes divertida y mes bonica.
ResponderEliminar¡COM VAM XALAAAAR!
Bueno, bueno, bueno, como he disfrutado leyendo el reportaje, un diez, lo has clavado. Me ha echo recordar buenos momentos en aquellos impresionantes parajes. El agua de las pozas un poco frias eeehhh? jeje,pero del todo compensado por el espectaculo que viene detras.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarRutas con encanto que sólo el que las recorre disfruta como se merecen.
ResponderEliminarExcelente ruta ,no hace mucho estuvimos de vacaciones por esta zona y la verdad que me encantó muchísimo sus paisajes y su luz maravillosa , sin duda alguna volveremos als Ports.
ResponderEliminarSaludos des de la Costa Brava.
Gracias por vuestro reportaje teníamos algunas dudas, sobre la dificultad del final de las Gubies, creo que son aptas para nuestro nivel y las intentaremos este mismo mes de julio 2014, ya veis que algunos años mas este articulo sigue vivito, un saludo
ResponderEliminarGenial carana444 , esta ruta me trae muy buenos recuerdos. Las Gubies sólo tienen la dificultad del tramo inicial en el que hay (o había) una cuerda para ayudarse. Luego ya es todo fácil.
EliminarSaludos, disfrutar.