Paseantes : Paco, Josele y el que escribe.
Dificultad : Media
Valoración de la senda : Muy buena
A destacar : Vistas increíbles desde lo alto de la Tinença
Problemas : Muy mala señalización
Recorrido : Pantano de Ulldecona - Salt de Robert - Fredes - Portell de l'Infern - Pantano de Ulldecona
Distancia : 16 Km
Tal y como venía anunciando, hoy hemos recorrido la senda que va a Fredes desde el Pantano de Ulldecona, subiendo por el Salt de Robert y bajando por el Portell de l'Infern.
Podéis ver detalles del sendero en estos links :
- LA SUBIDA : PR-75.2
- LA BAJADA : PR-75.1
Bueno, a las 7 de la mañana y con más sueño que otra cosa cogemos el coche en dirección al pantano, con la intención de empezar el sendero desde la cola del mismo, pero el despiste de tan tempranas horas hizo que nos pasáramos un par de kilómetros y aparcamos en un rellano que hay tras pasar un pequeño puente, que nos permitió dejar el coche en una zona tranquila y fuera del tráfico de la pista principal.
Tras un reconfortante café con leche, sobre las 8:30 ponemos rumbo a Fredes con un mapa que obtuvimos de un libro de senderos, el cual nos indica el desnivel, el croquis (muy bien detallado) y la explicación textual del recorrido.
De izquierda a derecha Paco, Josele y Angel
Sin esperarlo, el mapa fue mucho más necesario de lo que hubiéramos deseado ya que las marcas del sendero brillan por su ausencia, convirtiéndose el día en una interesante marcha de orientación (con mapa incluido, eso si je,je).
Sólo iniciar la caminata, dejamos la pista principal y empezamos a remontar el barranc de salt por su margen izquierda en una ligera pendiente que nos hace estirar y calentar las piernas para lo que nos esperaba más adelante.
Al poco nos encontramos a la derecha un refugio forestal, pero no paramos al no albergar interés alguno para nuestra ruta.
Seguimos ascendiendo mientras la pendiente sigue aumentando su dificultad y la frondosidad de los pinos nos empieza a hacer entender el porqué del fabuloso entorno de la Tinença.
Un poco más adelante observamos a la derecha unas curiosas formaciones rocosas, que tras indagar un poco averiguo que se denominan Balmas. Allí podemos ver diversas piscinas que se han ido acumulando por la filtración del agua que proviene del Salt de Robert, el cual nos encontramos tras unos 20 minutos más de ascensión.
Tenemos ante nosotros un salto de agua, que en tiempo de lluvia tiene que ser un espectáculo digno de apreciar. Nosotros disfrutamos el paraje, pero con muy poca agua a vistas.
Ante la senda que nos lleva al Salt de Robert
Paco y Josele ante el Salt de Robert
Paco nos dice, venga que solo falta media hora ... JA!!
A partir de este punto es cuando se acaba la broma y empieza la SUBIDA con mayúsculas. Un escalón, tras otro. A cada cual más alto y empinado que el anterior con una subida de las que machacan las piernas, pero que, una vez superada crea afición.
El premio al esfuerzo lo obtenemos en un falso llano en mitad del ascenso. Nos desviamos a la derecha y disfrutamos de unas vistas del valle increíbles, pinares rojos destacan entre la frondosidad del resto.
Las vistas hacia la mitad de la ascensión
Tras contemplar las vistas, continuamos hacia Fredes, conscientes de que lo más duro estaba hecho. Aunque todavía quedaban unos veinte minutos de senderos ascendentes, pero mucho más soportables y agradables para caminar. Es una senda estrecha, pero bien despejada, subimos, caminando entre pinos con la suerte de disfrutar de un clima muy agradable para la época.
Además gracias al infatigable amigo Paco que huele las setas a distancia y tiene una capacidad increíble para triscar entre los pinos pudimos observar una buena muestra de las variedades que nacen en estos pinares.
En la misma senda nos encontramos una nevera natural, que según me comentó Paco se usaba antiguamente para conservar la nieve hasta el verano, poniendo capas de nieve y paja.
La senda se acaba en una pista, en la cual si vamos hacia la derecha, en 5 minutos estamos en Fredes y si vamos hacia la izquierda, empezamos la bajada al pantano por el Portell de l'Infern.
Ante el indicador que nos lleva a Fredes
Decidimos ir hasta Fredes donde hacemos una pausa para almorzar y tomar un café en un restaurante del pueblo.
Tras el breve descanso emprendemos la bajada hacia el pantano. Salimos de Fredes por la misma pista por la que llegamos y al llegar al primer cruce vamos hacia la derecha, siguiendo la indicación de un poste que nos dirige hacia La Cenia.
La senda tiene una ligera pendiente, que se me hace pesada tras el largo ascenso de antes. Vemos a la derecha una fuente, la font del Teix. Llegamos al final de la pendiente y se abre ante nosotros la majestuosidad del paisaje. Estamos en el punto más alto y ante nosotros el vacío y el valle, que se presenta increíble con unas tonalidades otoñales que nos hacen embelesar.
Madre mía, ¿hemos subido tanto?
Iniciamos el descenso por una pista que nos lleva por la izquierda y que nos lleva hasta el Mas de Pitxón. Paramos a mirarlo, pero bien poco queda de la estructura del mismo.
Dejamos el mas de Pitxon a la derecha y seguimos el descenso que aquí se hace muy pronunciado por una senda que empieza bastante ancha, pero que al poco nos obliga a ir en fila india. Al poco llegamos a un paso entre dos rocas, siendo la de la izquierda una de fácil acceso.
Realmente merece la pena subir hasta ella, la inmensidad del paisaje nos embarga.
Tras unos minutos de embelese paisajístico seguimos bajando rápidamente hasta encontrarnos un sendero que baja por la izquierda, decidimos tomarlo, pero tras consultar el plano nos damos cuenta que nos lleva de vuelta al Salt de Robert. Así que retrocedemos y seguimos el sendero por la derecha que nos lleva hasta les balmes del Portell.
Allí podemos apreciar el goteo de una pequeña fuente por la montaña que se recoge en unos bebederos para animales hechos de troncos de pino vaciados.
Que no se caiga, que no se caiga ...
Realmente había agua ... y ¡muy fresca!
Tras esto pasamos el portell de l'Infern y continuamos el descenso a buen ritmo. Bajamos durante un buen rato y al encontrarnos con otro cruce sin señalizar, decidimos ir por el sendero de la derecha (tras consultar el mapa por la tarde con calma, veo que el sendero de la izquierda nos hubiera dejado cerca del refugio forestal). Esto nos obligó a realizar unos 3 kilómetros más ya que el sendero nos dejó en la cola del pantano y tuvimos que remontar la pista hasta el coche.
Cansados pero satisfechos y tras 4 horas y media de marcha, finalizamos la fabulosa ruta, digna de repetir.
Esta vez no puedo ofreceros los archivos de GPS ya que el móvil se ha cepillado la batería en muy poco tiempo (aun no se por que).
Prometo pedirme un GPS com cal para reyes.
De todas formas he escaneado los croquis de la ruta.
La subida por el barranc del Salt
La bajada por el Portell de l'Infern
¡Buena ruta a todos!
T´ha quedat molt "xulo" això!
ResponderEliminarAra solament falta posar la foto dels rovellons torraets!
Xa tu!!!!!
ResponderEliminarque contento que estoy, y encima no me duele ná de ná. Preparaos para la proxima, en la que haremos espeleologia, pudiendo disfrutar de unas aguas de dos mil años que producen unas risas que ni te cuento.
Solamente agradecer al autor los dos croquis que ha puesto. He hecho la ruta embalse-barranc del salt-fredes-portell-embalse y me han resultado de mucha más utilidad que el mapa cartográfico que llevaba.
ResponderEliminarImpresionante el nivel de detalle y la precisión. Muchas gracias.
Por cierto, la ruta una maravilla. Hemos disfrutado mucho.