Ante la imposibilidad de compartir la salida familiar del sábado, con Ángel y Cía., al Castillo de Pulpis, hemos decidido realizar un paseo familiar, similar y también por La Serra d’Irta, pero en la vertiente contraria (NW ), dentro del Término municipal de Peñíscola.
Por la inoportuna pero esperada y deseada lluvia, retrasamos la salida. A las 12:40, ¡Uf que tarde!, llegábamos, con sol, y en coche, al precioso paraje Mas del Señor, de fácil acceso a través del PR194 que discurre por todo el parque natural protegido Serra d’Irta.
Simplemente abandonamos la ciudad de Peñíscola en dirección sur, por la carretera serpenteante que, a ras de costa, nos lleva hasta la Urb. Font Nova, y que seguimos hasta que termina el asfalto; enlazamos con la pista, señalizada claramente como PR194, y seguimos por la misma unos 4Km. hasta llegar al Mas del Señor, donde dejamos el coche, y disfrutamos del precioso y magnífico paraje.
Por la inoportuna pero esperada y deseada lluvia, retrasamos la salida. A las 12:40, ¡Uf que tarde!, llegábamos, con sol, y en coche, al precioso paraje Mas del Señor, de fácil acceso a través del PR194 que discurre por todo el parque natural protegido Serra d’Irta.
Simplemente abandonamos la ciudad de Peñíscola en dirección sur, por la carretera serpenteante que, a ras de costa, nos lleva hasta la Urb. Font Nova, y que seguimos hasta que termina el asfalto; enlazamos con la pista, señalizada claramente como PR194, y seguimos por la misma unos 4Km. hasta llegar al Mas del Señor, donde dejamos el coche, y disfrutamos del precioso y magnífico paraje.
Panel indicativo y paraje natural.
Junto a las señales del PR, en la parte trasera del Mas.
Magnífico ejemplar arbóreo; en el Mas.
Nacimiento del arroyuelo que discurre por el Mas.
Paseando por el paraje "Mas del Señor".
Los tres paseantes disfrutando de la naturaleza.
Tras la pausada visita, nos dirigimos, ya a pie, siguiendo los postes, y las correctas marcas indicadoras del PR194, hacia el Pou del Moro.
Tras recorrer Km. y medio, por la amplia y cómoda pista, por donde transcurre el PR, entre pinares, algarrobos, olivos y la típica vegetación mediterránea arbustiva, llegamos al Pou del Moro (pozo del moro).
Aprendiendo a reconocer y a seguir la buena señalización de los senderos.
Llegamos al Pou del Moro.Tras la visita y fotos de rigor, desandamos la pista en busca del coche,
El presente y el futuro posando ante el Pou del Moro.
Dejando atras el Pozo del Moro.
Con la tormenta y sus truenos tras los talones, llegamos nuevamente al Mas del Señor.
De vuelta otra vez ante el Mas del Señor.
Durante este paseo, tuvimos tiempo de adminar la flora de la zona, de la que tomamos alguna muestra.
Busqueda interior.
Estrella... de semillas.
Contraste cielo y tierra.
Gota de lluvia posada sobre flor.
También hemos podido disfrutar de la fauna de la zona, algún que otro renacuajo en las charcas, y gran cantidad de insectos; cada uno con su tema...
En plena faena, acicalando y aprovisionando la casa.
Jugando al escondite, ¡no toi!.
Estos no se esconden. ¿Que estaban haciendo?
Con el tiempo justo nos metemos en el coche, y diez minutos más tarde, recibimos la descarga de agua y granizo de la tormenta, que al final ya de vuelta a casa, nos da alcance.
Vistas de Peñíscola desde la pista PR194.
¡Buena ruta a todos!.
¡Nen!, buen sitio para dar un paseo familiar.
ResponderEliminar... incluso desafiando a la climatología ... jaaaaaa
A ver si se crea afición, je,je